
Dupla perfecta: integración de bombas de calor y sistemas fotovoltaicos en el sector residencial español p371g
Por Paola Pedraza 2z1647
En los últimos años, la integración de bombas de calor con sistemas fotovoltaicos ha dejado de ser una propuesta emergente para convertirse en una solución consolidada dentro de la transición energética. Esta combinación tecnológica ha demostrado ser una de las más efectivas para avanzar hacia una edificación más sostenible, energéticamente eficiente y respetuosa con el medio ambiente. Gracias a su sinergia, es posible alcanzar la autosuficiencia energética, reducir drásticamente el consumo de combustibles fósiles y disminuir las emisiones de CO2.
Para profundizar en sus beneficios y retos, Review Energy conversó con Héctor de Lama, Director Técnico de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), quien analizó los factores clave que explican el creciente interés por los sistemas híbridos de bomba de calor y autoconsumo fotovoltaico.
Aunque en enero la asociación celebró que en España se habían superado los 8 GW instalados en autoconsumo, también insistió en una serie de mejoras normativas. Entre ellas, la inclusión del autoconsumo combinado con bombas de calor o almacenamiento como actuaciones estandarizadas para la obtención de Certificados de Ahorro Energético (CAEs), lo que impulsaría aún más esta fórmula como eje central de la eficiencia energética en España.
Eficiencia, ahorro y sostenibilidad: una solución integral 3n1bs
Desde el punto de vista de la eficiencia energética, la ventaja más evidente de integrar una bomba de calor con un sistema fotovoltaico es que la energía generada in situ puede ser consumida directamente por el propio sistema de climatización. “Esto no solo permite un ahorro directo en la factura eléctrica, sino que convierte a la bomba de calor en una medida activa de eficiencia energética”, explica de Lama. Al reducir la dependencia de la red eléctrica, también se minimizan las pérdidas de transporte y distribución.
Esta integración cobra aún más sentido si se considera que muchas instalaciones solares generan excedentes durante las horas centrales del día. Dichos excedentes pueden ser absorbidos por la bomba de calor, incrementando así el autoconsumo y reduciendo el vertimiento a la red. “Cuanto más elevado sea el consumo eléctrico en la vivienda, más energía solar se aprovechará directamente, mejorando notablemente la eficiencia del sistema”, añade de Lama.
El experto también hizo énfasís en otros beneficios:
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Alivio para la red eléctrica: La integración de autoconsumo con baterías reduce los picos de demanda y descongestiona la red en horas solares, permitiendo usar la energía almacenada en momentos de mayor consumo.
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Mayor seguridad energética: Combinado con baterías, el sistema garantiza independencia frente a apagones y asegura el suministro eléctrico del edificio.
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Alta eficiencia del sistema: A diferencia de las centrales térmicas, la fotovoltaica apenas pierde entre un 1% y 2% de energía en la conversión, lo que refuerza la eficiencia no solo por el menor consumo, sino por el uso de tecnologías más eficaces.
Una apuesta por la descarbonización real 543hl
La eficiencia energética no es el único beneficio. Como subraya el experto de UNEF, “una bomba de calor con un coheficiente de rendimiento (COP por sus siglas en inglés) de 4 proporciona un 75% de calor renovable y un 25% de energía eléctrica”. Sin embargo, esa electricidad puede provenir de fuentes fósiles si no se cuenta con autoconsumo. Por ello, incorporar generación fotovoltaica garantiza que incluso ese 25% restante sea también de origen renovable. “Sin autoconsumo, las bombas de calor siguen dependiendo del mix eléctrico nacional, que todavía no está completamente descarbonizado”, recalca.
Por tanto, la combinación bomba de calor + fotovoltaica es una de las soluciones más potentes para avanzar hacia edificios de consumo casi nulo y alcanzar los objetivos climáticos europeos.
Consideraciones técnicas clave para un diseño eficiente i332p
Diseñar un sistema híbrido eficiente requiere atender a múltiples factores. En primer lugar, se deben analizar las características de la bomba de calor (tipo, consumo, zona climática) y adaptar el sistema fotovoltaico a las necesidades energéticas del inmueble. Esto incluye considerar el perfil de consumo, el espacio disponible para es y la modalidad de autoconsumo más adecuada (con o sin excedentes, individual o compartido).
Además, uno de los aspectos más importantes, según de Lama, es “lograr la coincidencia entre los momentos de generación solar y los picos de consumo de la bomba de calor”. Para maximizar esa sinergia, puede ser necesario incorporar un sistema de baterías que almacene la energía para su uso nocturno o en días nublados. “Y es imprescindible contar con un sistema de gestión energética que permita coordinar ambos sistemas en tiempo real”, advierte.
Impacto del clima y retos operativos 6w3z3b
Como ocurre con toda tecnología renovable, el rendimiento de estos sistemas también depende de las condiciones locales. En este sentido, la irradiación solar es clave para dimensionar correctamente la instalación fotovoltaica. “La orientación, inclinación y ausencia de sombras son variables fundamentales en el diseño”, afirma de Lama.
En cuanto a la bomba de calor, su eficiencia puede variar en función de la temperatura exterior. No obstante, las bombas modernas están preparadas para rendir adecuadamente incluso en climas fríos, especialmente cuando se selecciona el modelo adecuado y se optimiza el sistema completo.
Respecto al mantenimiento, el experto destaca que “los sistemas deben ser monitorizados y mantenidos periódicamente para asegurar su correcto funcionamiento”. Las empresas instaladoras, cada vez más especializadas, ofrecen contratos de mantenimiento que aseguran la operatividad a largo plazo.
El rol de los incentivos y las políticas públicas 6f1r6n
Finalmente, el éxito de estas tecnologías también depende del respaldo institucional. En España, el Real Decreto 477/2021 establece ayudas para la climatización renovable y el autoconsumo, dentro del marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Adicionalmente, UNEF trabaja para que la combinación de bomba de calor y autoconsumo sea reconocida dentro del sistema de CAEs, lo que podría abrir nuevas vías de financiación e incentivos fiscales, como bonificaciones en el IBI o deducciones fiscales.
“Desde UNEF, creemos que es esencial crear mecanismos que favorezcan la electrificación de los consumos finales. Es decir, que faciliten económicamente la compra e instalación de bombas de calor con autoconsumo, especialmente en el momento inicial”, concluye de Lama.
La integración de bomba de calor y sistema fotovoltaico representa una de las estrategias más eficaces para lograr edificaciones sostenibles, con un elevado nivel de autosuficiencia energética y bajos costes operativos. Es una tecnología madura, escalable y alineada con los objetivos climáticos europeos. Sin embargo, para que su adopción se generalice, será clave seguir desarrollando políticas públicas que impulsen su implementación, faciliten su financiación y promuevan el conocimiento técnico entre profesionales y s.
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