Un nuevo informe publicado por Ember muestra que reemplazar las importaciones de combustibles fósiles con tres palancas clave (vehículos eléctricos, bombas de calor y energías renovables) puede reducir las importaciones netas de combustibles fósiles en un 70%, ahorrando a los importadores 1,3 billones de dólares a nivel mundial cada año. 6m341v

Con el debilitamiento de la Pax Americana, el 74?% de la población mundial que vive en países importadores de combustibles fósiles se enfrenta a crecientes riesgos de seguridad energética. Durante décadas, la estabilidad global respaldada por Estados Unidos permitió que el mundo desarrollara una fuerte dependencia de las importaciones de petróleo, gas y carbón. Sin embargo, en un contexto geopolítico cada vez más incierto, esa dependencia se vuelve una amenaza.

En la antesala de la Cumbre de la AIE sobre el Futuro de la Seguridad Energética, Electrotech propone una nueva estrategia para afrontar estos desafíos. Con el comercio global más frágil que nunca desde la Segunda Guerra Mundial, es urgente que gobiernos y líderes empresariales reconsideren su enfoque hacia un modelo energético más seguro, resiliente y autosuficiente.

La electrotecnología puede ahorrar el 70% de las importaciones 6v1h4k

Existe un nuevo camino hacia la seguridad energética: una estrategia electrotecnológica de dos frentes: cambiar la generación de electricidad a renovables y orientar el uso de energía hacia la electricidad.

Reemplazar los combustibles fósiles importados mediante tres palancas clave —vehículos eléctricos, bombas de calor y renovables— puede reducir las importaciones netas de combustibles fósiles en un 70 %, lo que representa un ahorro global de 1,3 billones de dólares anuales. El mayor impacto proviene de la sustitución de todo el petróleo importado para el transporte por carretera a nivel mundial por vehículos eléctricos (33 %). Ampliar la energía eólica y solar para sustituir todos los combustibles fósiles importados en la generación de energía global supone un ahorro del 23 %. Las bombas de calor, que sustituyen todos los combustibles fósiles importados utilizados para la calefacción de edificios en todo el mundo, suponen un aumento del 14 %. En conjunto, abren una ruta más rápida y económica hacia la independencia energética.

El estratega energético de Ember, Kingsmill Bond, señaló que “Las naciones importadoras de fósiles son como ranas en agua hirviendo, sin detectar el peligro que aumenta gradualmente. La dependencia de las importaciones lleva décadas en aumento, y ahora Donald Trump ha subido la temperatura. La electrotecnología ofrece la vía de escape más rápida ante esta creciente amenaza”.

El reporte señala que la oportunidad de la electrotecnología está abierta a cualquier país. Donde los combustibles fósiles están geográficamente concentrados, las energías renovables están ampliamente disponibles y son abundantes. El 92 % de la población mundial tiene el potencial de satisfacer más de diez veces su demanda energética con energías renovables. El potencial global de energía solar y eólica es casi 100 veces mayor que la demanda energética mundial actual y 120 veces mayor que la producción total de combustibles fósiles.
Para estimar el potencial de ahorro disponible para los importadores de combustibles fósiles mediante la electrotecnología, evaluamos tres palancas principales: energía solar y eólica, vehículos eléctricos (VE) y bombas de calor.

Su potencial se calcula de la siguiente manera:

• Energía solar y eólica: Se asume que tienen el potencial de reemplazar hasta el 100% de los combustibles fósiles importados que se utilizan actualmente para la generación de electricidad. Esto no implica que la energía solar y eólica proporcionarán toda la electricidad del sistema, sino que la proporción de electricidad generada actualmente a partir de combustibles fósiles importados puede ser reemplazada por fuentes renovables nacionales.

• Vehículos eléctricos (VE): se supone que sustituirán todos los combustibles fósiles importados utilizados para el transporte por carretera.

• Bombas de calor: Se supone que reemplazarán todos los combustibles fósiles importados utilizados para calefacción en edificios.
No existe un plazo específico prescrito para este potencial, ya que el ritmo al que las naciones logren estos ahorros depende de las decisiones que se tomen hoy.